sábado, 20 de diciembre de 2014

Sección Infantil Troglobios en el Monte Xalo - Escalada y Rapel - 15/11/2014 - ACTIVIDADES INFANTILES

Un día típico de montaña, con el tiempo cambiante, humedad, viento, y bancos de niebla entrando a media tarde, parece que el invierno ya está aquí! ...mientras en lo alto del Petón do Xalo, avanza un grupo de pequeños e intrépidos troglobios!
 El lugar, es el más cercano a Cambre para poder escalar en granito.
 Dado que no tenemos rocódromo en Cambre, y el de Coruña cierra por actividades, a falta de pan, buenas son tortas, y el Monte Xalo es ideal para ir curtiendo a nuestros jóvenes montañeros.
Los valientes Papás, Mamás y acompañantes, padecieron las inclemencias del clima, pero se sumaron a la aventura de descubrir este mítico enclave de
la escalada en Coruña, parte de su monte y caminos hacia las antenas, en los que destacan los grandes bolos graníticos en los que desarrollamos nuestra actividad...


PARTICIPANTES: 12 Bruno, Enara, Aimar, Iris, Alex, Ana, Manuel, Penélope, Candela, Cristina, Eva y Richard de Guías de Actividad.

FECHA: 15 de Noviembre de 2014


En estas fotos vemos al grupo descubriendo los pasadizos naturales que comunican los diferentes sectores de escalada, son oscuros, con musgo, y las paredes están húmedas con el suelo bastante resbaladizo!




...la erosión de este monte a través de los años ha creado singulares escondites entre los enormes bolos de granito, sobres los cuales tenemos unas vistas impresionantes de la zona de Arteixo y de Coruña, con el mar al fondo....
Bruno en lo alto del Petón, es ya un pequeño gran conocedor de la zona!
Después de una pequeña rutilla por la zona, montamos un pasamanos para acceder con seguridad a la vía de escalada más sencilla del Xalo, donde todos pudieron rapelar asegurados por Richard desde la reunión, para que una vez abajo, todos practicaran escalando la vía que descencendieron previamente...
Eva, al comienzo del pasamanos, explicando su finalidad y comprobando que ordenadamente, y con el material técnico todo OK, uno a uno, nuestros pequeños troglobios disfrutaban de la experiencia.

Con la espesa niebla entrando y el viento cada vez más fuerte, la aventura se aproximaba a estar en plena montaña, con el tiempo de repente ofreciendo condiciones mucho más difíciles, y resultando más duras también mentalmente y físicamente las escaladas...

















Por suerte, un chocolate calentito en un termo que traía escondido Eva, nos puso a todos el cuerpo a tope para subir la empinada cuesta con trepadas, que nos lleva finalmente a la explanada donde están aparcados los vehículos.