utilizamos en Espeleología, como usarlo, y practicar un poco con ellos.
PARTICIPANTES: Diego, Paco, Javier, Eva, Carlos, y Richard
FECHA: 17 de Mayo de 2015
Diego pasando un desviador |
LOS NUEVOS TROGLOBIOS SON DE RAZA LOBA!
Diego, Paco y Javier, aprenderieron al momento todo lo que les intentamos transmitir Carlos, Eva, y el que aquí os escribe.
Descubrimos, conocíendoles un poco más, que se les dará bien la Espeleo en Vertical. Pronto los veremos en alguna sima bien profunda, sintiendo ese vacío tan indescriptible, que te hace sentir pequeñito e insignificante, pero que a su vez, te permite admirar la grandeza de Madre Tierra.
Estas son algunas fotos de los nuevos compañeros, practicando en el Refugio a tres metros de altura, las diferentes maniobras técnicas que se encontrarán en las cuevas: fraccionamientos, pasamanos, cabeceras en volado, desviadores, nudos, etc...
Paco, en un fraccionamiento, simulando un pozo |
Tienen la paciencia necesaria para no ponerse nerviosos facilmente, y son buenos deportistas, así que contaremos con tres activos espeleólogos de la cantera troglobia, que nos acompañen en nuestras aventuras subterráneas.
Próximamente, Paco, Javier y Diego participan en las Jornadas de TPV de la Federación Galega de Espeleoloxía.
Desde la Directiva Troglobia les deseamos lo mejor, y que lo disfruten a tope, con los máquinas de la E.G.E.
Al finalizar las prácticas, realizamos una Ruta cerca de Sasdónigas que conocía Carlos G., uno de los espeleólogos de Troglobios y de Aradelas más involucrado, activo y polifacético.
Interior de la calera |
En la Ruta que nos mostró, visitamos una vieja calera...
...su construcción parece bastante moderna, y todabía se encuentra en buen estado de conservación, pese a los años que llevará sin funcionar.
Parte alta de la calera, mucho mas moderna que las de Covas en Rubiá |
También no muy lejos de la calera, visitamos un aserradero de piedra abandonado
...aquí, podéis ver algunas imágenes de las ruinas del aserradero, que se encuentran con el paso del tiempo entre una espesa vegetación y pequeños arrollos...
Estos riachuelos eran canalizados en la parte de arriba, y movían las sierras a través de engranajes, haciendo cortes perfectos, en la piedra que se trabajaba. Nosotros encontramos en el suelo algo de mármol.
La luz, entra a cuentagotas en el bosque que nos rodea. No muy lejos, se escuchan los pequeños saltos de agua, observamos el óxido y la vegetación como se entremezclan. Damos un último paseo por dentro del esqueleto de esta obsoleta instalación, hasta que decidimos regresar a los vehículos; dando por concluído un Domingo de actividad con el Club muy productivo!
Hasta la próxima Troglobios!!!